Fachadas de
edificios destruidos, vehículos que no te dejan pasar ni aunque ellos tengan
rojo y tu verde, pasos de peatones borrados, maquinas expendedoras de tabaco, y
si eres palermitano: no se paga billete de autobús, no se usa cascos ni
cinturones de seguridad... Señores: esto es Palermo.
Eso fue lo que pensé
el primer día cuando llegue. Me llamo Sergio y terminé el GS de Administración
y Finanzas en el IES CARTUJA en 2013/2014. Llevamos más de 1 mes en Palermo y
puedo decir que muchas cosas han cambiado desde entonces. El primer día cuando
me llevaron al trabajo al llegar me ofrecieron un café, pasteles y después me
dieron para leer un libro de leyes italianas que no entendía ni el traductor de
Google. Hoy puedo decir aunque no me lo crea que me entiendo con ellos y
realizo diversos trabajos, desde lo que todos hacemos el primer día de trabajo
(archivar, fotocopiar, escanear y volver a archivar) hasta realizar tareas como
escribir cartas en italiano o hacer tareas de contabilidad.
Parece que todo lo
escrito son cosas malas así que voy para compensar voy a decir que la
experiencia esta siendo increíble y que se la recomiendo a todo el mundo, ya
que oportunidades como estas no surgen todos los días. Aunque solo hayamos
estado poco tiempo puedo decir que he mejorado mi nivel de italiano, que
entiendo bastante bien lo que hablan y que, aunque con errores, puedo hablarlo
y entenderme con cualquier persona que hable italiano. He conocido bastante
gente en gran parte, gracias a Asterisco, ya que realizamos un curso de
italiano y hemos realizado algunos "tándem" y reuniones informales
(ir de cervecillas) y nos ha
dado la oportunidad de conocer gente y poder hablar el idioma.
Respecto a las
salidas, bueno, no hemos salido mucho ya que nos ha tocado una mala época para
el bolsillo, pero si hemos realizado actividades cercanas, nos hemos recorrido
la ciudad de Palermo entera y hemos hecho algunas actividades culturales como
visitar la catedral, iglesias, las catacumbas o ver un partido de futbol (esto
también es cultural), entre otras cosas. Vivimos en la zona más céntrica de
Palermo por lo que es una gran ventaja a la hora de moverse.
Por cierto después de un mes, los vehículos me dan el paso, da gusto subirse en un autobús cuando hay controles de billete, y las fachadas de los edificios son una bonita decoración de esta isla en la que todavía no ha hecho frío ningún día. Conclusión, no hay que fiarse de las apariencias.
P.D. Por último quiero terminar dando las gracias al IES CARTUJA por hacer lo posible para que pudiésemos venir y que todo estuviese en condiciones y a Asterisco por ayudarnos a que no estemos perdidos en esta ciudad caos.
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